[Internacional] Los trapos sucios de “Humana”. El negocio de la ropa usada

¿Sabes de esos contenedores que aparecen y desaparecen por tu ciudad para donar la ropa usada? ¿Los mismos que se ‘posan’ intencionadamente a las puertas de iglesias, colegios o centros públicos y que tienen un globo terráqueo y la palabra ‘cooperación’ como reclamo? Pertenecen a la ONG internacional Humana, una rama de la secta nórdica Tvind, condenada ya en varios países por enriquecimiento y actividades ilícitas. Su fundador, Amdi Petersen, lleva varios años desaparecido. Te cuento como juegan estos grupos con la buena fe de la gente.

Cuando ves un contenedor de estos a la puerta de un centro social o caritativo, supones que la cadena de donaciones no se interrumpirá después de depositar inocentemente tu ropa. No hay ninguna información en el contenedor que te haga suponer que detrás hay un negocio, un lucro y una mala gestión de recursos que hace que tu donación ayude a pagarse la mansión de algún caradura. En realidad no hay ninguna información que te cuente qué hacen con tu donación. En la ausencia está su ganancia. Sí, …esa ropa que donas se vende probablemente a dos manzanas del contenedor en las propias tiendas de la ONG, o a precio de saldo y baja temeraria en algún pequeño mercado africano; asfixiando la economía local por no poder competir con sus bajísimos precios. Pero lo peor no es eso. ‘Humana’ funciona y sigue funcionando como aparato financiador de su secta destructiva madre: ‘Tvind’.

Tvind es una organización danesa de finales de los sesenta que nació de la mano del visionario Amdi Petersen como un movimiento innovador en la concienciación de los problemas del tercer mundo. Se trataba de llevar a los jóvenes directamente a que vieran in-situ los problemas de los pobres. El éxito fue inmediato y la manipulación de los adolescentes también. Amdi desapareció con las primeras denuncias hasta que fue detenido en los 90 en las Islas Caimán. El movimiento de ‘solidaridad’ se extendió por toda Europa a finales de los ochenta con el nombre de Humana/ Humana People to People/ UFF/ DAPP. En 1989 un periódico danés destapó el escándalo de la financiación y desvíos de fondos de Humana a la secta Tvind.

Nadie puede demostrar que toda la ropa se reinvierte en proyectos de ayuda al desarrollo. Sólo un dato; los principales líderes de ‘Tvind internacional’ han sido juzgados —y algunos condenados— por evasión de impuestos, fraude y enriquecimiento ilícito. Los no condenados huyeron tras la sentencia para evitar el proceso de apelación. En 2001, el grupo de periodistas daneses que destaparon el caso, descubrió unas propiedades de lujo a nombre de los dirigentes de la secta y valoradas en más de 6 millones de euros ¿De donde sale todo ese dinero? No lo dudes. De tu caridad… En el año 2009 se recogieron, solo en Vigo, 160.000 kilos de ropa aproximadamente. No es de extrañar que la ONG esté preocupada por los constantes robos en sus contenedores de una ropa que no se sabe muy bien a quién pertenece.

Pero eso no es todo, la ONG ‘Humana’, a pesar de estar denunciada ante el Defensor del Pueblo y la Fiscalía General del Estado Español, sigue con el más lucroso de los negocios —la venta de donaciones gratuitas— además de convertir su estructura social en una secta comercial al servicio de su jerarquía y manipular psicológicamente a sus miembros. No son pocas las quejas y denuncias de voluntarios y trabajadores de la supuesta ONG de los métodos y extorsiones laborales a todos sus integrantes. El problema se ha agudizado con el aumento del paro y la desesperación del que acaba trabajando para cualquiera. No es más que una secta comercial más.

Pero: ¿Cómo se protegen estas organizaciones? Muy fácil. La mayoría construye un escudo borroso a base de contratos y acuerdos con las administraciones públicas o concejalías de Medio Ambiente de turno, esto es, apoyos a una idea que refuerzan su credibilidad e imagen de cooperación y labor social. ¿Quién va a dudar de un negocio basado en la cooperación y patrocinado desde ayuntamientos y administraciones públicas? Estás harán la vista gorda a la menor sospecha por estar implicadas.

La ONG ha negado siempre sus lazos con Tvind-Humana y te remite a sus auditorías para negar la mayor. Pero a la vez, como su nombre ha estado por siempre ligado a la organización, se transmutaron de Humana People to people a Fundación Pueblo para pueblo, conservando la estructura y el negocio pero añadiendo un nuevo producto para lavar su imagen: Los apadrinamientos infantiles. Sin embargo, esta organización sigue actuando con impunidad, todas sus tiendas de Madrid siguen operativas y se puede donar la ropa de diferentes maneras. El negocio continúa ayudado por la coyuntura social. La pregunta es ¿Cómo demostrar y juzgar las cuentas de una ONG que basa sus ingresos en conseguir donaciones imposibles de controlar en valor y en cantidad? El negocio es perfecto. Afortunadamente muchos ayuntamientos y administraciones están retirando todos los contenedores de la supuesta ONG. Tenlo en cuenta la próxima vez que quieras donar tu ropa usada.

Fuente: http://kurioso.es/2010/09/07/los-trapos-sucios-de-humana/