Los agentes implicados presentan un parte de lesiones y dicen que la pareja se “resistió” a la detención .
ep, sevilla
Una pareja de sevillanos, conformada por O.R.N. y A.J.M., presentó en la mañana de este lunes una denuncia penal en los juzgados del Prado de San Sebastián de la capital hispalense contra cuatro agentes del Cuerpo Nacional de Policía, los cuales, según la versión de la pareja, les habrían agredido “brutalmente” en plena calle “sin razón alguna” y sin identificarse, pues iban de paisano, lo que motivó que la mujer tuviera que ser intervenida en un centro hospitalario de una herida en la zona del ojo izquierdo que requirió de 40 puntos de sutura.
Según relata la pareja en la denuncia, los hechos tuvieron lugar entre las 4:00 y las 4:15 horas del día 5 de junio, cuando la pareja salió de un bar y se dirigió a su vehículo, aparcado en la calle Santa María de Ordás. Tras introducirse en el coche y comenzar a circular, pararon en un semáforo en rojo, momento en el cual “fueron asaltados por cuatro individuos, que se colocaron a ambos lados del coche e instantáneamente empezaron a golpear las puertas del vehículo”.
La denuncia indica que dos de los agentes “mostraron sendas placas de Policía, al tiempo que gritaban que bajaran del coche”, pero “dada la extrema violencia con la que actuaron, apareciendo de la nada y sin ningún tipo de distintivo policial, todos muy jóvenes y más bien con aspecto y modo de actuación de asaltantes o atracadores, y puesto que no existía indicio alguno de que fueran realmente policías”, A.J.M. -el conductor- les pidió que mostraran los carnés, pero los agentes “hacían caso omiso e intensificaron la violencia, llegando a romper el cristal delantero del copiloto”.
En este sentido, y tras ello, la pareja “creyó que iba a ser objeto, como mínimo, de una agresión, por lo que, aterrada, decidió poner en marcha el vehículo, siendo interceptada a unos 50 metros por otros vehículos policiales en el cruce con Carretera de Carmona”, de manera que A.J.M. salió del coche “con las manos en alto”, momento en el cual las cuatro personas que “asaltaron” primeramente el coche “se acercaron por la espalda y lo detuvieron, propinándole en ese momento diversos golpes en costado y piernas”.
Lesiones en el rostro
De este modo, O.R.N. también salió del vehículo pidiendo “socorro” e intentando llamar por teléfono a su hermano, agente de la Policía Local, momento en el que uno de los agentes “le arrebató el teléfono de un manotazo y la agarró de los pelos por la nuca, arrastrándola hacia sí y empujándola con extrema violencia contra el quicio de la puerta del coche, causándole un profundo corte de varios centímetros desde la parte izquierda de la nariz hasta la parte inferior del ojo, atravesando el pómulo, así como un corte en la ceja”.
Tras todo ello, ambos fueron detenidos, siendo trasladado a los calabozos de Blas Infante A.J.M. por un delito de atentado, mientras que O.R.N. también fue detenida, aunque debido a que sangraba “abundantemente” por la herida abierta en la cara fue trasladada al Hospital Virgen Macarena, y en el camino una persona uniformada le dijo “cállate la boca que estás harta de coca y de porros, como no te calles no te llevamos al hospital”. En el hospital se le realizó un análisis toxicológico que dio negativo.
Tanto O.R.N. como A.J.M., que fueron posteriormente puestos en libertad provisional y sin fianza por el Juzgado de Instrucción número 16 de Sevilla, comentaron este lunes que las circunstancias del suceso les hacen pensar que los agentes “se equivocaron de personas”, haciendo un llamamiento ciudadano para que, en el caso de que hubiera testigos, éstos lo pongan en conocimiento de la autoridad judicial al objeto de que “se conozca la verdad” de los hechos.
Actitud “sospechosa” de la pareja
Por su parte, la versión ofrecida por los agentes del Distrito Macarena es distinta, ya que en su atestado explican que, en la noche de autos, observaron a cuatro personas -entre ellas a la pareja- en actitud “sospechosa”, tras lo cual la pareja se introdujo en un vehículo e inició la marcha, según informaron fuentes policiales.
Tras ello, los “tres” agentes siguieron al coche y le dieron el alto, identificándose con la placa y el carné profesional al objeto de que se apearan del vehículo, pero “no se bajaron” e iniciaron nuevamente la marcha, “teniéndose que quitar de en medio uno de los agentes, porque si no hubiera sido atropellado”. A continuación, el turismo de la pareja se paró en un semáforo en rojo y los agentes, nuevamente, se identificaron y les instaron a bajarse del coche.
No obstante, y según las fuentes consultadas, la pareja “se negó” a bajar, por lo que los agentes emplearon la fuerza “justa” para hacerlos bajar, aunque el hombre “se resistió y la mujer comenzó a lanzar patadas, una de las cuales alcanzó a un agente en los testículos”. Todo ello ha motivado que, en el atestado, los agentes incluyan un parte de lesiones, lo cual “tiene valor de denuncia” contra la pareja.