Un joven resulta herido tras la brutal agresion sufrida a manos de elementos de la inseguridad privada del metro, en Larrabasterra.
Una vez mas, la violencia gratuita a manos de la inseguridad privada de Metro Bilbao se ceba con un usuario.
Aski da !! Txakurrak… Alde Hemendik !!

Larrabasterra auzoa, Sopela * E.H
En plena celebración de las fiestas de El Carmen en el barrio de Larrabasterra (Sopela * Bizkaia), la estación de metro fue testigo de un altercado entre un joven de unos 30 años y elementos de inseguridad privada de Metro Bilbao.
La trifulca se produjo sobre las 7.30 horas y el joven tuvo que ser atendido por los servicios de urgencia y trasladado al hospital a consecuencia de las heridas sufridas tras la brutal agresion sufrida. Pese a esto, no se produjeron detenciones.
Tanto el joven como los agresores implicados en la disputa, han interpuesto denuncias en los juzgados, con lo que el caso se resolverá mediante un juicio rápido.

Version de l@s testig@s… “El joven recibio una brutal paliza”.
“Primero vinieron dos agentes con porras, como amenazándole, y al verlo la gente les empezó a chillar para que le dejaran en paz”.
“De repente aparecieron otros seis o siete vigilantes también con porras y, al ver esto, la gente intentó proteger al chico”.
“Las puertas del metro se cerraron, y vimos al chico tirado en el suelo de la estación y ensangrentado. Él estaba boca abajo, con cuatro o cinco seguratas alrededor de él y otros dos o tres tumbados sobre él. Le habían metido una tunda de escándalo”.
La escena generó revuelo. La gente comenzó a gritar. Los allí presentes comenzaron a increpar verbalmente a los vigilantes del metro para que soltaran al joven. Tanto fue el jaleo que se creó en la estación que, incluso el conductor del vagón, se vio obligado a detenerse. “Le habían metido una paliza increíble. El chico estaba sólo.
Tras lo ocurrido los testigos llamaron a los servicios de emergencia para que atendieran al herido. “Cuando llamé me dijeron que ya tenían notificación de lo sucedido, estaríamos llamando muchos”.
“Cuando le pegaron, las puertas del metro estaban cerradas, pero si no llega a ser así, creo que la gente se los come”.