Según el diario “20 minutos”, la cárcel de Soto del Real, en Madrid, ha sido objeto de varias investigaciones por parte de Instituciones Penitenciarias tras detectarse irregularidades y delitos cometidos por funcionarios. Las pesquisas han provocado que dos trabajadores hayan sido expedientados y suspendidos de empleo y sueldo y que también se abrieran investigaciones en la Fiscalía de Madrid acerca de robos de objetos de valor que depositan los presos cuando llegan a la cárcel, un servicio de venta de alcohol a internos que se paga a través de giros postales y otro ‘servicio’ que introduce a los reclusos objetos prohibidos que les envían los familiares.