Esto cuando la marcha ya casi llegaba al Cementerio y algunxs encapuchadxs lanzaron objetos contra carabineros.
Una vez que la manifestación llego a las puertas del Cementerio cerca de un centenar de encapuchadxs comenzaron a encender barricadas con el mobiliario urbano y al mismo tiempo sacaron a los periodistas a golpes del lugar, también se incendio un bandera Chilena y otra Estadounidense.
Luego les llego el turno a todos los vehículos de prensa que se encontraban estacionados a las afueras del Cementerio y a los periodistas que allí estaban. Con piedras, palos, botellas y patadas fueron atacados los móviles de prensa con sus asquerosos paladines al interior, quienes arrancaron como pudieron del lugar, para luego ir a lloriquear juntos como se pudo apreciar en los noticieros.
También desde los vehículos algunxs compas lograron sacar todo tipo de herramientas periodísticas, como cámaras, cables, cajas, pedestales, etc… las cuales después fueron lanzadas al fuego y reducidas a plástico derretido.
En esta oportunidad la prensa no alcanzo a refugiarse en las espaldas de sus camaradas de las fuerzas del orden, como lo suelen hacer en otras ocasiones, y recibieron estas acciones según sus propias responsabilidades que han asumido en esta guerra, es la prensa quien colabora codo a codo con las policías preparando el terreno para los golpes represivos del Poder, es así como ha sucedido con la decena de compañerxs que ahora están detenidxs por el “caso bombas”, con los Centros Sociales y Okupas cerrados y con todxs lxs compas perseguidxs e investigadxs. Este ataque contra la prensa no es casualidad, son ellos quienes en muchas oportunidades han enjuiciado publicamente a compañerxs, son ellos quienes festejaron la muerte del Mauri y son ellos quienes defienden a los explotadores y como dicen por ahí “ojo por ojo” y que agradezcan que ninguno fuese hospitalizado…
Lxs encapuchadxs recibieron a los Carabineros con piedras, bombas de pintura y algunos cocteles molotovs mientras que los agentes lanzaron quimicos con el carro lanza-aguas y gases lacrimógenas.
Al final de esta jornada de protesta los carabineros detuvieron a 20 personas, la mayoría por desordenes y otrxs por portar líquidos inflamables