‘La cólera nihilista del suburbio es reflejo del nihilismo del sistema dominante’
M. Amorós (‘La cólera del suburbio’)
Cuando en noviembre del 2005 Miguel Amorós escribía el texto citado antes sobre la revuelta en las ciudades francesas, y en el que curiosa y comprensivamente se recordaban las revueltas de los ochenta de Brixton y Toxteh, hoy golpeadas de nuevo, debía tener en mente la posibilidad de su repetición. No hemos tardado demasiado en tener otro episodio de parecidas características. De nuevo se repiten algunos puntos. Un vecino de un suburbio muerto por la policía (en este caso directamente a balazos). Y una respuesta de gentes que incendian, saquean y atacan a la policía sin mediar con nadie. La extensión progresiva de la revuelta por otros suburbios de la ciudad y otras ciudades. Y la misma incomprensión, al menos aparente, de la opinión pública. Una opinión pública que como ya sabemos está fundamentada en la repetición incansable por parte del poder de una serie de clichés, y engullida por la masa ciudadanista. Una opinión pública que, como repiten todos los medios, incluye algo tan inconcreto como ‘los comentaristas’ o ‘voces’, y que a pesar de ser tan inconcreto sabemos perfectamente a quién obedece. Tanto en Francia como ahora se habló de ‘tensiones o problemas raciales’, pero tanto allí como en Inglaterra ahora queda claro que no es la raza la que determina la participación en la revuelta. También se vuelve a repetir la imagen amenazante de la figura política de autoridad. Si ahora es el primer ministro Cameron, entonces fue el ministro del interior, más tarde presidente de la república, Sarkozy. Si entonces se colocó a 20000 policías en las calles, ahora se pone a 16000. Y creíamos que había recortes, qué ingenuidad!! Entonces fueron 3000 detenidos y 600 encarcelados. En Inglaterra ya van más de 500 detenidos. Si entonces se declaró el toque de queda, ahora ‘algunas voces’ ya lo piden. Y lo mismo con las reformas legislativas. Habrá que ver si Cameron saca partido de esta revuelta para poder seguir imponiendo el estado de excepción de cara a los Juegos Olímpicos de Londres del 2012. Otra similitud más que muestra la cara más amable del encuadramiento ante el orden social. La llamada a la comunidad o a la familia para intentar frenar a los vándalos. Habrá que esperar más para saber si el Estado también implementará programas sociales para entretener a los que saben que tal y como están las cosas no hay más futuro que la beneficencia social o la cárcel para ellos.
‘Esto parece una zona de guerra’ (ciudadano londinense)
‘Sólo tenemos que entender que hay una guerra declarada justo aquí, ahora mismo’ (‘Beyond Amnesty’. Texto anónimo)
Ciudades en llamas, saqueos de tiendas y grandes almacenes, choques con la policía, tiendas y grandes cadenas que cierran anticipadamente. Estos episodios son algunas de las batallas que se libran en la guerra civil mundial que el colectivo Tiqqun plantea en sus escritos. No hace falta esperar las revueltas de antaño. Las batallas sociales de ahora no serán como las de antes. Los escenarios y las formas no son las mismas. Es imposible. La represión está más afinada y se compone en gran medida de la incomprensión buscada y alimentada por el poder, y en la que muchos que se consideran progresistas, de izquierdas, comunistas o anarquistas caen de la forma más penosa. No esperemos que la rabia no lo golpee todo cuando vivimos en un totalitarismo. Las palabras escupidas en el texto Beyond Amnesty, precisamente parido en Inglaterra, son elocuentes. Destruir la realidad que nos rodea para podernos sentir algo más libres. El capitalismo nos ahoga a diario. Así que no esperemos manifestaciones encuadradas y pacíficas o asambleas de expoliados o listas de demandas. Ese trabajo lo harán otros, los que representan.
The guns of Brixton
When they kick at your front door
How you gonna come?
With your hands on your head
Or on the trigger of your gun
When the law break in
How you gonna go?
Shot down on the pavement
Or waiting on death row
You can crush us
You can bruise us
But you’ll have to answer to
Oh, the guns of Brixton
The money feels good
And your life you like it well
But surely your time will come
As in heaven, as in hell
You see, he feels like Ivan
Born under the Brixton sun
His game is called survivin’
At the end of the harder they come
You know it means no mercy
They caught him with a gun
No need for the Black Maria
Goodbye to the Brixton sun
You can crush us
You can bruise us
Yes, even shoot us
But oh-the guns of Brixton
When they kick at your front door
How you gonna come?
With your hands on your head
Or on the trigger of your gun
You can crush us
You can bruise us
Yes, even shoot us
But oh-the guns of Brixton
Shot down on the pavement
Waiting in death row
His game is called survivin’
As in heaven as in hell
You can crush us
You can bruise us
But you’ll have to answer to
Oh, the guns of Brixton
Información actualizada en Lahaine.
Texto interesante sobre el asunto, aquí.