[Turquía] Mujeres anarquistas en Turquía oriental esperan acabar con la violencia doméstica

Traducido por alasbarricadas.org de:

http://www.hurriyetdailynews.com/n.php?n=the-anarchist-of-van-chases-husbands-beating-their-wives-2010-11-12

El Lago Azul ya no es sólo el lugar más famoso de la provincia oriental de Van, ahora es también el nombre de una organización de mujeres que pretende acabar con la violencia contra las mujeres en esta zona. La extrabajadora de la fábrica de zapatos Suna S,ahin, la “anarquista local”, está liderando el ataque contra la violencia doméstica a través de su activismo de base.

Tras intentar convencer a su padre de que dejara de golpear a su madre, SunaS,hain ahora dedica todo su tiempo a persuadir a los hombres en Van de que no levanten sus manos contra sus mujeres.

Las mujeres que han sufrido abusos por sus maridos y otros hombres en la provincia orienta de Van, ahora tienen un lugar al que acudir y agradecerle los esfuerzos a la anarquista residente en la ciudad, de 46 años y ex trabajadora de la fábrica de zapatos Suna S,ahin.

Desde que se retiró de su trabajo en 2007, S,ahin ha ayudado a cientos de personas expuestas a la violencia doméstica gracias a su organización, el Lago Azul, una asociación que ella contribuyó a crear que está inspirada en el icónico lago de la provincia.

Los objetivos de la asociación son llegar a las mujeres que son víctimas de la violencia y movilizar a las mujeres proveyendo oportunidades sociales, económicas y culturalas, según dice Sahin
Los funcionarios de Lago Azul organizan semanalmente tours a aldeas y barrios para encontrar mujeres golpeadas por sus maridos, escuchando sus problemas previamente a intentar convencer a sus maridos de que cambien sus formas.

Convertirse en feminista mientras se está frente al horno

“Para tener una vida libre e igualitaria, es un deber tener mujeres asumiendo importantes papeles (o puestos) en la sociedad en la que vivimos”

Nacida y crecida en Van, S,hain estudió empresariales por correspondencia antes de obtener un título de asociada de la Escuela Profesional de Agricultura en Yüzüncü University.

Al mismo tiempo, S, ahin también crióo dos hijos y ha ayudado a las mujeres maltratadas – un impulso que surgió de las experiencias de su infancia.

“fui la 11ava niña en una familia de 13 niños. Mi padre tuvo mucha compasión con sus hijos y fue muy democrático hacia sus niños, pero pegaba a mi madre muy a menudo”, dijo.

Tras aprender a leer y escribir, se centró en artículos sobre mujeres. Mientras hacía el pan alrededor del tandoori junto a su madre y otras mujeres, S,hain leía las existosas historias de otras mujeres.

Después, tras cursar la escuela elemental, S,ahin se enfadó con su padre por estar constantemente golpeando a su madre y trató de protegerla.

S,ahin dijo que trató de convencer a su padre de no recurrir a la violencia “Creo que conseguí persuadirle en los últimos años”:

Esta experiencia temprana hizo a S,ahin convertirse en la “anarquista” de Van, aunque sería mejor descrita como feminista. La etiqueta, aún así, suele ser aplicada a cualquiera que se rebela contra el status quo en Turquía.

Muchos hombres son receptivos

Aunque las mujeres hoy día siguen expuestas a la violencia doméstica o a ser violadas por sus maridos, los problemas han mejorado desde que S,ahin y otras activistas en la región han intensificado su actividad.

“Todas las mujeres aquí nos conocen. No tenemos nada que ver con el ayuntamiento o la policía. Si hay una mujer siendo maltratada, viene al Lago Azul atravesando los viñedos.

Si la mujer quiere un divorcio, le ayudan a encontrar abogado y refugiarlas en pisos de acogida.

“si la mujer está indecisa acerca del divorcio, vamos a visitar a su marido y le explicamos que no debe pegar a su mujer. Le explicamos los detalles de sus derechos legales. A veces, os sobrepasamos un poco asustando a los maridos. A veces incluso les decimos que acabarán en la cárcel por el resto de sus vidas”.

De forma sorprendente, no es especialmente difícil llegar a los hombres en Van, ya que los hombres que no escuchan a sus mujeres o hijas se sienten obligados a escuchar a otras mujeres extrañas como gesto de buena educación. (esto lo he traducido un poco libre, pero el significado considero que es así)

“hay hombres a los que visitamos tres veces en un mes para persuadirles. Se avergüenzan cuando les visitamos. Las mujeres nos cuentan todo. Sabemos que hay maridos que dejan de golpear a sus mujeres para evitar tener que enfrentarse a “las mujeres anarquistas”.

Las mujeres miembro de la asociación Lago Azul, no están amenazadas ni expuestas a la violencia en la región. A pesar algunos hombres las sonríen y las reciben con amabilidad, otros las ven como mujeres que controlan las rupturas entre marido y mujer.

De acuerdo a S,ahin, las segundas esposas están en una posición peor ya que no están legalmente casadas y por lo tanto, no tienen derechos legales.

“las segundas mujeres, a edades mayores, no tienen ningún derecho legal. Normalmente permanecen en un piso de acogida por un tiempo, pero sus maridos o familiares las convencen para volver a casa.

Enseñando a los chicos acerca de los derechos de las mujeres

Las actividades de la asociación no están limitados a adultos. Tras la escuela, se llevan a cabo horas de lectura para niños entre 7 y 13 años.

Aunque lso estudiantes son chicos, Sahin también les enseña acerca de los derechos de las mujeres, leyéndoles artículos sobre el tema durante los 10 últimos minutos de cada clase.

Cuando alguna otra obligación hizo que las horas de lectura fueran interrumpidas durante un periodo de tiempo, los niños preguntaron a Sahin para reanudar las sesiones de lectura.

Los hombres de las nuevas generaciones tienen más conocimiento y son más liberales, las parejas jóvenes raras veces acuden a ellas por sus problemas. “La chicas en Van serán más libres que las chicas en I.zmir’ (otra provincia turca)

Al ser consultada por cómo la violencia podía ser totalmente eliminada en Va, S,ahin djo que si la violencia debida a las actividades del ilegalizado PKK (Partido de los trabajadores del Kurdistán) terminaba (y de este modo había una apertura para las inversiones, la conciencia social mejoraría y las mujeres serian una fuerza laboral más activa.

Si los sectores público y privado inviertieran en la región, del mismo modo que invierten en I.zmir, las chicas de turquía oriental irían un paso por delante de las chicas de Izmir”

56% de mujeres expuestas a la violencia

Alrededor del 59% de mujeres han sido víctimas de la violencia en 2006, de acuerdo con la Asociación de mujeres de Van, VAKAD, que realizó una encuesta con 766 mujeres entre las edades de 15 a 60 años.

El 53,7% acusó a su marido de actuar violentamente contra ella, mientras el 29,8% acusó a su suegra y el 13,3% acusó a otros miembros adultos de su familia. 2% acusó a su suegro y el 1,2% acusó a las segundas esposas.

338 mujeres de las 766 dijo que había sido víctima de la violencia fuera de su hogar, con el 29,6% por parte de novios, 22,9% por parte de superiores, 17,6% por parte de jefes, 17,4% por parte de profesores, y 12,5% por parte de compañeros de trabajo, de acuerdo con las encuestadas.

Mientras, el 83,5% dijo que había sufrido maltrato psicológico, 66% había recibido insultos, 44,1% maltrato físico, 33,7% económico y 14,7% sexual.

Al mismo tiempo, la mitad de mujeres estaba casada por matrimonio cocertado mientras que sólo las tituladas universitarias manifestaron tener libertad para decidir a su esposo.

Cuando las mujeres fueron preguntadas,”si tuvieras una segunda oportunidad para venir al mundo, vendrías com mujer de nuevo”? Sólo la mitad de las encuestadas respondió “Sí”.