De esta forma ayer los compas fueron llevados ante el 11° Juzgado de Garantía de Santiago donde la fiscalía Sur solicito ampliar la detención hasta el próximo martes, donde serian formalizados por “instalación de artefactos explosivos o incendiarios y asociación ilícita terrorista”, cuestion de la cual el ministerio del Interior tambien se haria parte arriesgando 20 años. Durante la audiencia quedó demostrado una vez más el carácter circense de la justicia chilena. La jueza Lidia Bruna accedió a todas y cada una de las peticiones de la Fiscalía y el Ministerio del Interior (presencia de prensa, extensión del plazo de detención por 3 días, incomunicación de los detenidos entre sí y respecto de visitas del exterior, y además -la guinda de la torta- la orden de traer al Grillo a la audiencia del martes, para formalizarlo junto al resto de los supuestos integrantes de esta “asociación ilícita terrorista”). Los buitres de la prensa burguesa estaban todos dentro de la sala de audiencias y disparaban sus flashes una vez que la jueza dio la señala pata que los carceleros hicieran ingresar a nuestros compas.

Las alegaciones de los defensores eran oídas y denegadas una tras otra. La jueza tenía todo preparado pues cada resolución la leía automáticamente con su voz de vieja de mierda de un papel que tenía arriba de su despacho.

Cuando le preguntó a uno de los compas si tenía reclamos que hacer en relación a la detención y éste dijo que había sido reiteradamente amenazado de muerte, respondió “ah, eso nomás”. Tampoco pareció llamarle mucho la atención el relato acerca de la destrucción de las casas particulares de otros compas. Cuando la Fiscalía justificó las lesiones causadas al compa de la Sacco y Vanzetti (un perdigón de goma en la cabeza y una lesión en la nariz) en el hecho de que éste se habría asomado a una ventana del inmueble arrojando cosas y destruyendo evidencia, cuestión que el compañero negó inmediatamente calificándolo de versión “imaginativa”, fue reprendido por faltar el respeto a los fiscales. O sea que golpear y amenazar gente de muerte y reventar casas innecesariamente es parte de la normalidad que los jueces defienden, pero cualquier cuestionamiento al aparato represivo no puede tener lugar en este circo. La misma actitud mantuvo esta señora cuando un abogado defensor habló de que había una “orquestación” entre los diferentes medios de prensa para culpabilizar desde ya a los compañeros.

Cuando fue evidente que el show ya estaba cesando para continuar el día martes a las 9, se empezaron a sentir los gritos de apoyo, muy bienvenidos por el ánimo de los compañeros. Se extendieron lienzos afuera de la sala de audiencias, se entonaron cantos de apoyo (“Liberar a los presos por luchar”), la la expresión de la vieja momia era de asco y espanto, unos guardaespaldas rodearon de inmediato a Jalandro (quien por su talla tan pequeña podría ser fácilmente eliminado de un par de combos en el hocico y una buena patada en la raja. Nota: sabemos que Jalandro y los suyos leen atentamente esta página, así que aclaramos que esta alusión es tan sólo a modo de ejemplo y no constituye una amenaza sino a lo más una fantasía). Luego de forcejeos entre quienes fuimos a apoyar a los compañeros con dos tipos de perros policiales (gendarmes y prensa), la jueza fascista hizo otra señal con la cual fueron retirados nuestros 14 compañeros y acto seguido, desde la zona de calabozos, apareció un contingente furioso de gendarmes armados con palos y escudos, que volaron por sobre los bancos de imputados y abogados con la clara intención de ir a golpear a los amigos y familiares de los detenidos. Por supuesto que la prensa burguesa ha señalado que todos nosotros, tan malos como los imputados, agredimos a la prensa y los otros guardianes del orden capitalista, pero la verdad es que la agresión provino de ellos, tanto periodistas como gendarmes golpearon salvajemente a muchas personas, y afuera del recinto se les unieron sus amigos de carabineros iniciando una cacería que no tuvo por objeto detener sino castigar directamente. La compañera Luisa Vergara resultó con un TEC cerrado, la madre de uno de los detenidos tenía lesiones leves causadas por un cacho periodista, y por suerte gran parte de los vidrios de dicho templo de mierda fueron destruidos para ser usados en contra de los chanchos.

La solidaridad no es palabra, es accion. Cada accion que desencaja el modo en que domina la sociedad de clases nuestras vidas mediante la alienacion de la miseria cotidiana es un modo en que ejercemos un rechazo a este orden que se amplia en diversos modos, prolifera de diversas formas. Podran encarcelar hoy a los compas, la caza continuara mientras exista sociedad de clases. Pero las formas en que el proletariado enfrentara al enemigo adquirira otros modos de expresarse tal como lo ha sabido hacer durante esta larga historia de explotacion. La negacion de lo existente seguira en todas sus formas hasta que nos reconozcamos en el otro, en el hermano de clase para avanzar hacia la liquidacion de este orden. No bajar la guardia y no desmoralizarse que esa es una herramienta que ocupa el Estado/capital para intentar apropiarse de nuestras acciones y neutralizarlas.

Una vez fuera del recinto, supimos que el hostigamiento seguía: el CSO Sacco y Vanzetti estaba siendo cerrado por un operativo conjunto de pacos y ratis. Durante la tarde, el inmueble había estado custodiado por una camioneta de la PDI, cuyos ocupantes en principio negaron el ingreso de un grupo de compas, pero después accedieron a dejar entrar y sacar cosas, advirtiendo que había una orden para no dejar que el recinto fuera ocupado nuevamente. Horas después, a eso de las 18:30, las policías habían entrado al recinto y se encontraban realizando trabajos para cerrar todos los accesos. La Biblioteca y todas las otras cosas que no fueron incautadas (en esta ocasión se llevaron pocas cosas en el allanamiento) permanecían secuestradas allí. Los policías no exhibieron ninguna orden de desalojo ni nada, y dijeron que se trataba de órdenes del fiscal. Además, dijeron que el recinto sería recuperado por sus legítimos dueños, el ISP. Una operación rápida que los tomó por sorpresa permitió recuperar una cierta cantidad de libros, que fueron puestos a buen resguardo, lo que desató una pequeña persecución policial en la zona, sin detenidos.

Se sabe que tambien se allano la casa de los padres del compa Retamales.