Texto de Distri Maligna:
Este texto lo hemos escrito con motivo de la VIII edición del Encuentro del libro anarquista de Madrid (Diciembre de 2010), con la intención de dar a conocer algo tan profundo y transcendental para nosotrxs y para el movimiento anarquista como es “La revolución interior”. Para que lxs compañerxs que lo lean reflexionen, debatan y hagan nuevas aportaciones en cuanto a este tema y aquellxs que no hayan comenzado en la interesante y arriesgada revolución personal, se atrevan y comiencen a dar sus primeros pasos, ¡suerte!
Hay algo que sin duda alguna diferencia a lxs libertarixs de las demás personas (al margen de su rechazo a los partidos políticos, estructuras jerárquicas, la autoridad y otras muchas cuestiones relevantes, que pertenecen a lo que se conocen como las bases del movimiento libertario) y es que llevan sus ideas a la práctica comenzando por su día a día, en lo cotidiano, demostrando así que una sociedad libre y justa es real y necesaria.
Debemos predicar con el ejemplo, si no nuestro discurso estará completamente vacío de contenido y las personas a las que pretendemos llegar no verán nada real en nuestras prácticas (además de sentirse engañadxs) y por lo tanto no darán el paso hacia la concienciación que puede desembocar en la rebelión y la transformación de la sociedad. Muchas personas se autodefinen como anarquistas, libertarias o antiautoritarias, pero con eso no es suficiente. Algunxs de lxs compañerxs que lucharon en la guerra social de 1936, otrxs de lxs que se enfrentaron con uñas y dientes a la dictadura militar franquistas… no se atreven a utilizar esas definiciones para sí mismxs, ya que según ellxs conlleva una gran responsabilidad y a pesar de sus numerosas, ejemplarizantes y arriesgadas luchas, no se sienten con la capacidad de autodenominarse anarquistas. Resulta cuanto menos sorprendente, que hoy día a pesar de encontrarnos en una situación bastante menos prometedora que en la que se encontraron quienes nos precedieron en esta larga batalla, son muchxs quienes se llenan la boca de batallitas y dan un ejemplo de falta de humildad bastante desmoralizador, por lo que sería conveniente pararse a pensar sobre esto y tratar de evitar este tipo de comportamientos.
Hay muchas cosas que se pueden hacer si queremos comenzar a cambiarnos a nosotrxs mismxs, mientras tratamos de destruir la sociedad en la que vivimos para construir una nueva. Por ejemplo, si realmente creemos en una sociedad basada en las relaciones humanas y personales y no en las relaciones de consumo, comencemos por consumir lo menos posible o lo que es lo mismo, sólo lo necesario e imprescindible (reciclando o expropiando de forma complementaria). Y dentro de lo que es ese tipo de consumo, tratando de evitar dentro de lo posible el colaborar económicamente con las multinacionales, tratando que los productos sean ecológicos, no sean transgénicos y no haya tenido que morir o sufrir ningún animal (incluido el ser humano). Ya que todxs nosotrxs tenemos una responsabilidad individual de lo que está sucediendo en lo referente a la destrucción del entorno y la vida que en él habita (la culpa de todo no es del Estado y el capitalismo).
Siguiendo con el abstenerse de lo que no es necesario y por lo tanto que forma parte del consumismo en el que se trata de compensar las carencias emocionales, afectivas, intelectuales, la falta de libertad, la normalización de las injusticias, etc. nos topamos con las drogas (alcohol, tabaco, hachís, cocaína…), las cuales pretenden llenar un vacío que no les corresponde, mientras nos hacen dependientes y enriquecen a camellxs, narcos, policías, jueces, abogadxs y un largo etcétera. Los medicamentos hacen lo propio dentro del campo de la medicina, anulando el Estado nuestra capacidad de autogestionar nuestra propia salud y dejándola en manos de desconocidxs que actúan al servicio de las farmacéuticas. Cuando llevando una dieta libre de productos de origen animal, ecológica, comiendo bastantes crudos, haciendo deporte, descansando lo suficiente y conociendo la sabiduría sobre medicina natural que se ha mantenido a lo largo de milenios, evitaríamos contraer gran parte de las dolencias y enfermedades que amenazan al ser humano.
Pero no todo lo que podemos hacer en nuestra vida cotidiana para ser más coherentes con nuestros ideales se reduce a los hábitos de consumo, también existen ciertas actitudes, roles, acciones… que distan mucho de considerarse libertarias y que por desgracia se reproducen una y otra vez en compañerxs o dentro de nuestros espacios. Nos referimos a actitudes sexistas, homófobas, agresiones sexuales e incluso violaciones, las cuales se llevan años trabajando (sobre todo por mujeres) y todavía queda mucho por hacer en ese sentido, sobre todo si se ignoran o se creen ya superadas. Los comportamientos especistas, actuando con superioridad hacia otros animales por el mero hecho de ser humanxs, tratando de forma horrible a animales domesticados o colaborando en el sufrimiento de otras especies animales y justificando su muerte, siguen a pesar de los esfuerzos de muchxs compañerxs existiendo en los círculos revolucionarios.
Terminaremos hablando de las actitudes autoritarias, de las acciones que se desempeñan a raíz de éstas y los roles que las sustentan (jefx, líder, patrón/a, amx, dueñx…) las que parecen ser inevitables entre nosotrxs, cuando en realidad lo que ocurre es que hay un reducido grupo de personas que se benefician de estas circunstancias y tratan de seguir sacando partido del autoritarismo (la mayoría de las veces bien encubierto y realizado de forma sutil, pero no por ello menos detectable o combatible). Pero va siendo hora de desterrar este tipo de valores tan destructivos de nosotrxs y de los ambientes en los que nos movemos, sin miedo, con confianza y apoyo mutuo conseguiremos acabar con los privilegios que ofrece la autoridad de una vez por todas.
¡CONTRA TODA AUTORIDAD Y NO SÓLO CONTRA LA QUE NOS INTERESA!
Somos conscientes de que no hemos tratado muchas cuestiones referentes a la revolución interior en este texto y que no hemos profundizado lo suficiente en otras, pero por una cuestión de tiempo y espacio este ha sido el resultado. Animamos a que este sólo sea el principio de un análisis y una transformación que está por venir.
http://distri-maligna.blogspot.com/2010/11/la-revolucion-interior.html