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[Todo por hacer] Ya está disponible para descargar el nº 25

Todo Por Hacer es una publicación anarquista que se edita mensualmente en Madrid. Se distribuye de forma gratuita en esta ciudad y se puede descargar en www.todoporhacer.org

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Contenido del mes de febrero
Noticias:

– La sinrazón del nuevo plan del transporte ferroviario

– Ya están aquí los dos años más de trabajo (y otras tantas cosas más)

– Redes de Solidaridad, una posible herramienta de acción colectiva

– Del conflicto a la tele, una cadena incierta

– Su ley, su trampa

– Sexualidad como Dios manda

Artículos:

– ZAD en resistencia contra el aeropuerto y todo su mundo

– Portugal. Resumen de año y medio de lucha

– Represión y racismo en Grecia

– Contrapsicología

Novedades

– [Ensayo] Escritos Contrapsicológicos de un educador social

Recomendaciones

– [Película] Casa de arena y niebla

– [Libelo] Cuerpo a cuerpo

– [Revista] Terra Cremada, nº 3

Últimos programas de algunos proyectos radiofónicos de febrero

Tirada: 2.000 ejemplares

Contacto: todoporhacer@riseup.net

www.todoporhacer.org

¿A qué juegan?

No nos duró mucho la alegría por la salida de Alfon de Soto del Real, si bien, el 9 de enero todos/as recibíamos con entusiasmo la noticia de su puesta en libertad -después de haber pasado casi dos meses secuestrado por el Estado en prisión preventiva y bajo el régimen FIES (intervención de las comunicaciones orales y escritas, seguimiento a familiares y amigos/as, aislamiento, registros y cacheos, 21 horas de celda, y un largo etc.)-; la mañana del 18 de enero las cadenas de la represión nos volvieron a golpear una vez más. Un compañero fue arrestado y secuestrado en comisaría, acusado de ser el propietario de la mochila que le encasquetaron a Alfon el pasado 14 de noviembre y que le costó más de 55 días de prisión provisional.
Una vez más, y sin sorprendernos lo más mínimo, la policía juega con la libertad y la vida de las personas, en este caso, pasando la mochila de unos a otros. Ayer era de Alfon, hoy es de otro, quién sabe si dentro de dos semanas será cualquier otra persona.

Salud y fuerza a los/as compañeros/as.

La lucha es el único camino

[Estat espanyol] La reforma del Código Penal: Una vuelta de tuerca más a la represión

Bajo un gobierno que encarcela injustamente a las personas, el lugar de una persona justa es la cárcel” – Henry David Thoreau.

El viernes, 14 de septiembre, el Consejo de Ministros recibió un informe del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, previo al Anteproyecto de reforma del Código Penal, norma con la que se procede a la revisión del sistema penal “para dar respuesta a las nuevas formas de delincuencia, a la multirreincidencia y a los delitos más graves”, en sus propias palabras. La reforma, en definitiva, supondrá un endurecimiento generalizado de las penas, a pesar de que España tiene uno de los Código Penales más duros de Europa y más de 76.000 presos (una de las mayores medias por habitante de Occidente).

La cadena perpetua ya está aquí

La mayor novedad de esta reforma es la introducción de la cadena perpetua, llamada de forma eufemística “prisión permanente revisable”. Su propósito es, según el ministro, endurecer el castigo en delitos “especialmente reprochables” como son los casos de magnicidio del jefe del Estado español o de jefes de Estado extranjeros que se encuentren en España, algunos casos de genocidio con resultado de muerte o violaciones masivas, delitos de terrorismo con resultado de muerte, o determinados actos de tal “brutalidad” en los que las víctimas sean menores de 16 años, o personas con discapacidad especialmente vulnerables y que tras la agresión sexual se produzca el asesinato.
En la rueda de prensa tras la aprobación del informe, el ministro apeló a casos que “han ocurrido en España” y que “en la mente de todos están”, refiriéndose a casos como el de Marta del Castillo, el de José y Ruth Bretón o la reciente excarcelación del preso enfermo Iosu Uribetxeberria Bolinaga, aunque negó tajantemente el carácter populista de la reforma.
Tampoco perdió en tiempo en asegurar que la aprobación de la cadena perpetua es perfectamente constitucional, ya que al ser revisable la condena (en una horquilla de 25 a 35 años, según la “brutalidad” del acto por el que fue condenado) “no se ve vulnerado el principio de la reinserción y reeducación del reo”.
Lo que más choca de esta modificación no es la adecuación del proyecto a la Constitución o no. Al fin y al cabo, las constituciones son modificables (como nos demostró el anterior gobierno hace un año) y la nuestra fue elaborada por muchos de los partidos políticos que ahora están llevando a cabo la reforma penal. Para quienes ostentan el poder, si resulta necesario realizar algún que otro cambio en el texto constitucional en un momento dado para que sea constitucionalmente aceptable, se puede hacer. Lo más impactante ha sido la ausencia en los medios, en las calles y entre la clase política de un discurso crítico con esta idea, de un debate con un posicionamiento claramente opuesto a encerrar a una persona de por vida en una celda. Las voces más disidentes se han encontrado entre las filas de profesionales del Derecho – como Jueces por la Democracia o la Asociación Progresista de Fiscales -, que han tachado la propuesta de “populista”, ya que han “legislado a golpe de titular” y la consideran contraria a Derecho porque “todo el mundo tiene derecho a saber cuánto tiempo va a estar en la cárcel”. Al margen de esta leve oposición – que no ha sido compartida por las asociaciones de jueces y fiscales mayoritarias, las cuales son de un corte más conservador -, nos encontramos con la aprobación del público o, en su defecto, una gran indiferencia en lo que a este tema se refiere.

 

Los delitos contra el orden público

Otra decisión polémica es la de la tipificación como delito de la difusión de mensajes que inciten a la comisión de algún delito de alteración del orden público (como pueden ser las “manifestaciones violentas”). Sobre este nuevo delito, Ruiz-Gallardón dijo en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que sólo se castigará la difusión de mensajes que inciten a la comisión de algún delito de alteración del orden público, pero “de ninguna manera la convocatoria a espacios o tiempos donde se pueden producir esos delitos”: no se penará la convocatoria a movilizaciones, sino la incitación a cometer actos de violencia.
Además, se amplía la definición del delito de atentado a la autoridad, que incluye todos los supuestos de acometimiento, agresión, empleo de violencia o amenazas graves de violencia sobre la policía y otras figuras de autoridad.
Pese a todo lo que se dijo meses atrás, Gallardón ha confirmado que la resistencia pasiva se mantiene igual que ahora[1]: no se equipara al atentado, pero se coloca junto a la desobediencia, penada con entre seis meses y un año de cárcel.
Y este nuevo ‘Código’ es el que Gallardón dice que “no es más represivo”, porque el orden público garantiza el ejercicio de derechos fundamentales, y quien garantiza a los españoles el ejercicio de sus libertades “son las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en primer lugar, todo lo que sea protegerlas es garantizar el ejercicio derechos fundamentales por parte ciudadanos”. Según el ministro, “no puede preocupar a nadie que no agreda directamente a Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con la novedad de que se hace extensivo a los servicios de rescate”, como el SAMUR.
A pesar de las bonitas palabras del ministro, la única conclusión a la que nos lleva una reforma de este tipo es que el Código Penal está pensado para ejercer un fuerte control sobre la población disidente, sobre los movimientos sociales, con el fin de sofocar toda respuesta en la calle a los recortes sociales que se llevan aprobando desde hace dos años.
En el contexto en el que nos encontramos en la actualidad, los mercados han impuesto la liquidación de la educación y sanidad públicas y gratuitas, imponiéndose la privatización, lo que implica un enriquecimiento de una minoría a costa de la salud de la mayoría. El paro ha alcanzado máximos históricos[2], el trabajo se ha precarizado más que nunca y el acceso a una vivienda se torna prácticamente imposible. Son momentos de tensión, movilizaciones y enfrentamientos y el Estado propone adoptar su faceta más represiva para acabar con todo ello.
Al igual que con las distintas reformas laborales aprobadas recientemente (siendo la última la de febrero de 2012[3]), una de las finalidades de la reforma del Código Penal es la de conseguir atemorizar a la población. La reforma laboral infunde el miedo en los trabajadores, a fin de limitar su capacidad reivindicativa ante los empresarios por miedo a perder sus puestos de trabajo. La reforma penal busca atemorizar a las personas que desean reivindicar mejoras sociales en las calles, a través del miedo a perder su libertad[4].
Esto se consigue, primeramente, mediante la hiper-protección de la “autoridad”[5], a costa del absoluto desprecio de derechos fundamentales, como los derechos de reunión, libertad de expresión o manifestación.
Posteriormente, una vez que se ha hecho un Código Penal a medida en el que se criminalice cualquier acto que se salga – mínimamente – de los cauces naturales de participación política (es decir, ejercer la responsabilidad política única y exclusivamente a través del voto cada cuatro años), se define como “enemigo”[6] a cualquier persona que se salga de los mismos y se busca encerrarle en una prisión.
En definitiva, esta reforma penal, al igual que las laborales, ha sido impuesta por los mercados. Los mercados imponen a los Estados reformas laborales y recortes sociales de gran envergadura, y a su vez acuerdan reformas penales para cortar toda protesta. Y para ello utilizan la seguridad como excusa, pese a que la ciudadanía no se va a sentir más segura porque el Código Penal sea más grueso y las cárceles se encuentren más llenas, si nos despojan de todo lo que necesitamos para sobrevivir.

 

La cárcel después de la cárcel

Otra novedad del nuevo “Código Gallardón” es la aprobación de la Custodia de seguridad. Se trata de una medida de seguridad, no una pena, pero en la práctica significa añadir hasta 10 años más de prisión (o de internamiento en algún tipo de centro) a un preso que haya cumplido ya su condena. Se aplicará cuando el tribunal sentenciador (la medida debe establecerla en el momento de dictar sentencia, no a posteriori) crea que hay “especial peligrosidad”. Y podrá revocarse en cualquier momento si desaparece esa peligrosidad. Se aplicará a delitos “de especial gravedad”: asesinatos, homicidios, secuestros, agresiones sexuales, delitos con violencia, terrorismo o tráfico de drogas.
A diferencia de la prisión permanente revisable (que será obligatoria en los delitos para los que está pensada), esta medida será discrecional: el tribunal podrá dictarla o no. Fuentes de Justicia explican que habrá dos supuestos: para los delitos más graves, la custodia de seguridad podrá dictarse en la primera condena; para el resto habrá que esperar a que el delincuente reincida para aplicarle esa medida — si el juez quiere — en la segunda condena.
A su vez, se amplía la figura de la libertad vigilada. Esta medida ya se incluyó en el Código Penal aprobado por el Gobierno socialista en 2010[7], para delitos sexuales y de terrorismo. Ahora se amplía a otros delitos, como los patrimoniales, robos o delitos violentos (por ejemplo con resultado de lesiones). Consiste en que el preso, una vez cumplida su condena en prisión y puesto en libertad, debe someterse a control o vigilancia judicial (con distintos mecanismos, como la obligación de presentarse en el juzgado o la colocación de dispositivos electrónicos) durante un plazo de 10 años. Debe imponerse también en el momento de dictar la sentencia, y puede ser revisada y retirada.
Tanto la custodia de seguridad como la libertad vigilada son medidas “basadas en pronósticos [de peligrosidad], no en hechos”, admiten desde el ministerio. “Pero el pronóstico se hace sobre una situación objetiva previa”, añaden.

 

Endurecimiento de penas

 

A pesar de que el Código Penal es uno de “los más severos de Europa[8], de que cada vez que se ha reformado en el pasado ha sido para endurecerlo más, de que las cárceles españolas se encuentran hacinadas y que los índices de delincuencia en España son de los más bajos de Europa, el gobierno ahora tiene a bien endurecer las penas por varios delitos.
Los casos de detención ilegal con desaparición de la víctima (ahora, penados con hasta diez años de prisión) serán equiparados a los homicidios (de 10 a 15 años) cuando el autor no diga qué ha hecho con la víctima, pudiendo llegar “hasta a 20 años si las víctimas son menores de 16 años o la detención está relacionada con una agresión sexual”, según Justicia.
En los casos de delitos sexuales, dejarán de considerarse como delitos continuados, sino que cada agresión sexual computará como un delito independiente, lo que hará “que vean incrementada la pena”.
También se endurecen las penas para quienes provoquen incendios forestales: hasta seis años de cárcel (en lugar de cinco años) en casos muy graves, y hasta nueve años si el incendio afecta a espacios naturales protegidos.
Por último, en lo que a delitos económicos se refiere, habrá una nueva regulación de la malversación y una persecución “más eficaz” del fraude y la ocultación de bienes en procesos de quiebras societarias.

Limitación de la libertad condicional

Si un preso recibe la libertad condicional y, ya en la calle, vuelve a cometer un delito, al regresar a prisión tendrá que cumplir todo lo que le quedaba de pena cuando salió en libertad condicional; mientras que con el Código actual, el tiempo que ha pasado fuera de la cárcel se le descuenta de la pena. Por otra parte, los condenados por primera vez a penas de hasta tres años y que muestren una conducta irreprochable tendrán más fácil acceder a la libertad condicional: podrán hacerlo a mitad de condena, frente a los dos tercios actuales.
Por otro lado, para agilizar la satisfacción de la responsabilidad civil, se podrá acordar o revocar la libertad condicional, al tenerse en cuenta si el reo ha ocultado bienes o no ha aportado información sobre los que dispone para no hacer frente a ese pago.

Nuevas faltas y delitos

Entre otras novedades, el nuevo Código Penal suprimirá las faltas, que se convertirán en delitos penados con multa o serán perseguibles administrativamente, con el objetivo de reducir la sobrecarga en los juzgados y de lograr un mayor índice de sanciones, ya que en los procedimientos de faltas es necesario ir a juicio, en el que se puede ganar o no. En cambio, en los procedimientos administrativos, la sanción de multa se impone directamente, notificándola al interesado, el cual puede presentar alegaciones contra la misma, pero siempre desde una posición de inferioridad, ya que en estos casos los agentes de policía gozan de presunción de veracidad, lo cual no ocurre en los juicios de faltas.
Entre otras cosas, se suprimirá la falta de hurto para sustituirla por un delito leve que castigará los casos en los que lo sustraído no supere lo mil euros, aunque para fijar este límite se tendrá en cuenta la capacidad económica de la víctima. Para ofrecer una respuesta adecuada a la multirreincidencia y la delincuencia grave, se prevé que en el caso de delincuencia “profesional” y organizada se les pueda condenar con el tipo agravado a penas de uno a tres años de prisión e, incluso, en los casos más graves, de entre dos y cuatro años.

 

Conclusiones

En definitiva, podemos resumir esta reforma en dos puntos: (1) por un lado busca dar respuesta y cortar las cada vez más presentes movilizaciones sociales en la calle, mediante el endurecimiento de penas relacionadas con el mantenimiento de la paz social y, (2) por otro lado, busca “solucionar” el problema de determinados delitos que crean malestar social. Un malestar generado por los medios de comunicación de masas y por la clase política que, mediante coberturas y debates populistas y demagogos, hacen que el público reclame una mayor represión contra terroristas, asesinos, violadores y carteristas. La imagen creada en el imaginario público es la de la impunidad absoluta de los criminales (lo cual se encuentra totalmente alejado de la realidad), por lo que el gobierno, para calmar los ánimos de indignación reinantes, endurece las penas como solución fácil y claramente disuasoria.
Esa es su solución para todo: represión y más represión.

[1] Véase “La que se avecina: la reforma del Código Penal y la estrategia del miedo”, en http://www.todoporhacer.org/la-que-se-avecina-la-reforma-del-codigo-penal-y-la-estrategia-del-miedo Como ya se dijo en otra número de esta publicación, un primer momento el ministro del Interior, Fernández Díaz, preveía incluir la resistencia “pasiva o activa” como un “atentado a la autoridad” (penado de 2 a 4 años).  Sin embargo, una semana más tarde, el ministro de Justicia explicó que finalmente este cambio no tendría lugar. Parece ser que las declaraciones de Fernández Díaz no eran más que un globo sonda hábilmente dirigido para observar la reacción que provocarían.
[2] Superaba el 23% en el momento en que escribimos estas líneas.
[3] Véase Todo Por Hacer: número especial sobre la reforma laboral, febrero 2012, en http://www.todoporhacer.org/monografico-sobre-la-reforma-laboral
[4]Hay que endurecer las penas por delitos de violencia callejera […] para que haya más gente que tenga más miedo al sistema y que no sea tan osada” dijo Felip Puig, conseller d’Interior de Catalunya (CiU), el 3 de abril de 2012.
[5]Según el Gobierno, el objetivo es ‘robustecer la autoridad’ y garantizar el orden público” – Todo Por Hacer nº 16, mayo 2012.
[6] Como lo hizo el director de la policía valenciana en referencia a estudiantes que se manifestaban de forma pacífica.
[7] Véase “Un breve análisis de la reforma del Código Penal por la Ley Orgánica 5/2010”, en http://www.todoporhacer.org/un-breve-analisis-de-la-reforma-del-codigo-penal-por-la-ley-organica-52010

[8] Véase El País, 14 de septiembre de 2012, en http://politica.elpais.com/politica/2012/09/14/actualidad/1347618555_361491.html

Extraído del nº 21 de la publicación anarquista Todo por Hacer
www.todoporhacer.org

[Publicacions] Todo por hacer nº20. Septiembre

Todo Por Hacer es una publicación anarquista que se edita mensualmente en Madrid. Se distribuye de forma gratuita en esta ciudad y se puede descargar en www.todoporhacer.org Contenido del mes de septiembre:
Noticias:

– Crisis y racismo. El inmigrante como chivo expiatorio

– Crisis y prostitución

– Mil años de perdón

– Ocupaciones de espacios y Autoorganización

– Otro paso más en la oleada privatizadora: la liberalización del sector ferroviario
Artículos:

– Gallardón y la penalización del aborto: de casta le viene al galgo

– Garoña para rato

– Cajas de Resistencia: Una herramienta más para afrontar conflictos
Recomendaciones:

– [Novela] Patagonia Express

– [Libro] Los pasos (in)visibles de la prostitución

– [Ensayo] En el acuario de Facebook. El resistible ascenso del anarcocapitalismo
Últimos programas de algunos proyectos radiofónicos

 

Sobre los fuegos en Valencia, los recortes y la militarización de las emergencias

Desde el primer momento, uno de los objetivos primordiales del Gobierno valenciano ha sido encontrar responsables a los/as que culpar del desastre. Así, se han dado prisa en señalar a dos jóvenes trabajadores que al parecer podían haber ocasionado el fuego en Cortes de Pallás, al soltar una chispa la sierra con la que trabajaban y a un agricultor que realizaba quemas de rastrojos en el incendio de Andilla.

Es evidente que esas actividades son peligrosas, más aún en una zona de alto riesgo de incendio, pero tal vez a los/as culpables de los fuegos que asolan todos los años los bosques de la península hay que buscarlos en los Gobiernos autonómicos y nacionales que con sus políticas ocasionan que cualquier chispa en terreno forestal se convierta en la quema de miles de hectáreas.

Los/as trabajadores del sector forestal, llevaban años avisando de que la situación era insostenible, que la reducción de presupuesto y de personal en la prevención de incendios y cuidado del monte creaba las condiciones perfectas para que en verano se declararan grandes fuegos. Y que las repoblaciones llevadas a cabo con pinos y eucaliptos, árboles de rápido crecimiento y, por tanto, muy apetecibles para la industria maderera, eran una temeridad, ya que son especies que arden muy fácilmente. Ecologistas en Acción, en un informe sobre la relación de estas especies con los incendios en la península, denunciaba que casi la mitad de los fuegos afectaban a bosques de pinos y eucaliptos, pese a que proporcionalmente estos árboles ocupan una mínima parte de la superficie forestal.

A estos problemas, hay que añadir la destrucción de la cadena trófica en nuestros montes, como consecuencia de la mala gestión y el abuso que los humanos hacemos de los recursos y espacios naturales, provocando un desequilibrio en el ciclo natural de los ecosistemas. Los espacios naturales son considerados como meros recursos económicos y modificados en función de los beneficios capitalistas que de ellos se puedan obtener, creando bosques y montes artificiales, casi sin animales y desestructurando los ecosistemas naturales. Existe una escasa población de animales herbívoros que mantengan limpios los montes al consumir la vegetación que en verano se seca y arde con facilidad. Y en las ocasiones en las que esta población aumenta son considerados como plagas por la ausencia de depredadores naturales que generalmente han sido eliminados por el excedente ser humano. La solución que se da a este problema es una vez más la imposición a la naturaleza de los intereses humanos: el excedente animal es suprimido mediante la caza, un exterminio de especies animales por placer que supone por un lado muerte, sufrimiento y ruptura de núcleos familiares y comunitarios de muchas especies y que por otro conlleva la contaminación del monte por plomo y la imposibilidad del disfrute de los espacios naturales por personas no armadas.

Y llega el verano y con él, las llamas

Como los/as trabajadores/as forestales habían avisado, con el calor empezaron a desencadenarse los incendios que deberían haberse intentando prevenir en los meses anteriores. Tras el incendio en el parque natural gallego de las Fragas do Eume en abril, las llamas atacaron a Andilla y Cortes del Pallás en Valencia, Comunidad Autónoma donde este año se habían contratado mil brigadistas antincendios menos que el año pasado y donde se produjo un recorte de cinco millones de euros en el gasto en extinción de incendios. Hay que reseñar también una coincidencia curiosa, en diciembre de 2011, el Gobierno valenciano modificó la Ley de Montes para suavizar la norma estatal que impide la construcción en terrenos afectados por incendios en los treinta años siguientes a la quema. Casualmente, uno de los parajes naturales en los que se pensaba cuando se redactó la ley, la zona de Dos Aguas ha sido devastada por el fuego, dejando vía libre a las constructoras para urbanizar el terreno. A esto hay que unir que en bastantes de los terrenos calcinados existían proyectos para la construcción de campos eólicos, cuya aprobación será ahora más sencilla.

Y una vez más, los recortes en personal de extinción de incendios tuvieron consecuencias desastrosas, como el fallecimiento de un piloto que trataba de apagar las llamas y la muerte de este trabajador, están los cientos de miles de animales que han perdido la vida y cuyas muertes no se han mencionado en ningún medio de comunicación. La zona quemada de Cortes de Pallás es una de las reservas de fauna más importantes del estado español, en cuanto a la cabra montesa y muflón. En estas zonas de alta biodiversidad de fauna, además de cabras monteses y muflones, viven lobos, zorros, tejones, visones europeos, jinetas, ciervos, entre muchos más. Muchas personas que se desplazaron a Valencia para salvar la vida a estos animales han denunciado que la Guardia Civil no les ha permitido colaborar en su auxilio con la excusa de que la fauna salvaje es tarea del Seprona y que los animales de granja son propiedad privada, por lo que en caso de llevárselos para proporcionarles asistencia se les podría acusar de robo.

Recortes en Madrid

En nuestra Comunidad, la gestión de los incendios no se salva de la ola de privatizaciones y recortes, convirtiendo el fuego, al igual que la educación, la sanidad, el agua… en un gran negocio. Cada vez más aspectos de prevención y extinción de incendios están siendo otorgados a FCC y ACS, dos de las mayores constructoras del Estado. Mientras, se reduce personal contratado directamente por la Comunidad de Madrid, siendo más de trescientos trabajadores/as los/as dejados/as de contratar desde el año 2008.

A la reducción de personal, hay que sumar el plantón realizado por los/as bomberos/as. Hartos/as de que la realización de horas extraordinarias fuesen utilizadas como excusas para el despido de trabajadores/as forestales y para no ampliar la plantilla de bomberos/as, aprobaron en referéndum dejar de hacer horas extraordinarias. Exigen que los 4,7 millones de euros gastados en remunerar las 153.000 horas extras realizadas se destinen a la contratación de más personal.

La UME (o el zorro cuidando de las gallinas)

Frente a los incendios, la respuesta del estado ha sido militarizar las tareas de extinción mediante la Unidad Militar de Emergencias (UME), creada en 2005, tras la plaga de incendios que asoló las tierras gallegas ese verano. La función de esta unidad del Ejército es la respuesta ante fenómenos naturales, principalmente en incendios (pese a que ya hemos apuntado que los incendios, de naturales tienen poco), pero su campo de actuación también incluye el combate a actos ilícitos y violentos o atentados terroristas, lo que en una época donde la frontera entre la protesta social y el terrorismo ha sido difuminada por el Estado, nos augura ver más frecuentemente a esta Unidad.


En los dos primeros años desde su creación, recibieron una inversión de 1.660 millones de euros y este año, no le han afectado los recortes que han mermado las plantillas del personal civil en todas las Comunidades Autónomas (50% en Castilla y León, 20% en Castilla la Mancha, 30% en Galicia, etc.) recibiendo el mismo presupuesto del año anterior, 150 millones de euros para una plantilla de sólo cuatro mil efectivos.

El despliegue del Ejército en el combate frente a las llamas presenta un doble peligro, por un lado, la eliminación de puestos de trabajo de carácter civil y la desviación de presupuestos civiles a militares. Otro riesgo es que se empiece a ver como normal la participación de un cuerpo armado, sujeto a los valores de disciplina y obediencia ciega, en cada vez más ámbitos de nuestra vida. Como denunciaba la Sección Forestal de la CNT de Salamanca, (http://old.kaosenlared.net/noticia/sector-forestal-salamanca-estado-fin-campana-incendios-forestales-ahor) “la actuación de la UME en los incendios “ha sido tratado como acto de heroicidad por parte de la prensa. El objetivo es que el ejército empiece a verse como una ONG al servicio del ciudadano, en lugar de la máquina de matar que es y será siempre.” Y como se expresaba en el texto Ellos están en guerra, ¿y nosotros? de la publicación Ekintza Zuzena (http://www.nodo50.org/tortuga/Ellos-estan-en-guerra-Y-nosotros), “queda claro que lo que los dominadores quieren hacer es, por un lado, forzar la militarización de los servicios de emergencia, ya que ahora en un desalojo o manifestación -para poner un par de ejemplos políticamente más extremos que las calamidades naturales-, si los bomberos se niegan a hacer tareas represivas, los efectivos de la UME están listos para quitarles el trabajo; y, por el otro lado, quieren pintar a los soldados españoles como los amigos del pueblo (que nunca han sido), es decir, presentarles no como los asesinos que son, sino disfrazarles como los que te ayudan en situaciones de dificultad, los que te sacan de la carretera cuando ha nevado «demasiado» o salvan a tus familiares de una aluvión o incendio forestal”

Esta militarización de los servicios de emergencia, al igual que ha ocurrido desde hace unas décadas con la ayuda humanitaria, es una tendencia que en los últimos años no ha dejado de acentuarse. Hemos podido ver la actuación de las fuerzas Armadas fuera de nuestras fronteras en la invasión multinacional de Haití tras el terremoto de 2010, el despliegue de quince mil militares en Nueva Orleans tras el paso del huracán Katrina encargados/as de la represión clasista y racista de los/as habitantes que se negaban a abandonar sus escasas posesiones e impedían una regeneración de la ciudad según los planes de las élites, y la ocupación de poblaciones en Italia tras las emergencias de las basuras en Nápoles en 2008 y 2010 y el terremoto en L´Aquila en 2009. En el Estado español les hemos visto actuar de revienta huelgas tras el paro de los/as controladores aéreos en 2010 y a Esperanza Aguirre se le llegó a ocurrir amenazar a los/as huelguistas de Metro de Madrid con militarizar el servicio en el verano de ese mismo año.

Hay que preguntarse también la pertinencia de dar al ejército un papel tan importante en la lucha contra el fuego, dado que este cuerpo es el responsable del 6% de los incendios ocasionados en el Estado por negligencias o accidentes. Así, este verano, las Fuerzas Armadas provocaron un incendio en el que ardieron cincuenta hectáreas en el Campo de Maniobras de San Gregorio en Zaragoza, mismo lugar donde en el año 2009 quemaron más de seis mil hectáreas en el que el personal civil no podía trabajar por el riesgo de explosión de las municiones abandonadas allí durante años.

Extraído del nº 19 de la publicación anarquista Todo por Hacer
www.todoporhacer.org

[Publicacions] nº6 de TODO POR HACER (julio 2011)

Todo por Hacer es una publicación gratuita mensual. Hay una tirada de 2.000 ejemplares disponible en la calle, y también se puede descargar en www.todoporhacer.org

1. Noticias

– Una nueva reforma laboral, nuevos recortes de derechos: ahora le toca a la negociación colectiva

– Las asambleas populares de barrios y municipios de Madrid pasan a la
acción

– La protesta frente al Parlament de Catalunya como desencadenante

– La web de la policía es atacada en respuesta a la detención de tres miembros de Anonymous

2. Artículos

– Las asambleas de barrio: una herramienta y su potencial – el ejemplo de la Assemblea del Barri de Sants

– Dentro, fuera, dentro… : acercamiento a una realidad silenciada

3. Herramientas.

– En la Fila de Atrás

4. Novedades editoriales

– [Libro] La revolución desconocida

– [Revista] Raíces

5. Recomendaciones.

– [Libro] La ideología anarquista

– [Libro] Vigilar y castigar

– [Libro] Cuando los políticos mecen la cuna

6. Últimos programas de algunos proyectos radiofónicos.

7. Algunas convocatorias del mes de julio en Madrid

Número 6. Tirada: 2.000 Ejemplares. Contacto: todoporhacer@riseup.net

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