Un pequeño número de miembros de Neturei Karta, un grupo de judíos ultra-ortodoxos radicalmente antisionistas, se unió a los árabes locales en la protesta con pancartas como “Sionistas asesinos” o “Árabes sí, sionistas no”.
Um El Fahem * Palestina ocupada
Diez árabes fueron arrestados hoy en los disturbios causados por una marcha nazi-sionista protegida por un gran despliegue policial en Um El Fahem, la segunda mayor ciudad árabe ocupada por el estado sionista de israel.
Durante la marcha, en la que participaron unos setenta activistas de extrema derecha, decenas de jóvenes árabes lanzaron piedras contra las F.S.E, aunque no hubo heridos en ninguna de las dos partes.
La Policía utilizó gas lacrimógeno y granadas de ruido, además de emplear a agentes disfrazados de árabes para efectuar arrestos.
Situada en el norte del país, Um El Fahem es, después de Nazaret, la ciudad arabe mas poblada, por lo que se esperaba que la convocatoria nazi-sionista generara enfrentamientos.
El número de policías desplegados, se cifra en unos 1.500.
Uno de los principales líderes de la ultraderecha israelí, pidió la ilegalización del Movimiento Islámico, el partido que gobierna en la ciudad, mientras que los participantes coreaban “Muerte a los terroristas”.
Otro líder nazi-sionista, aseguró que el Movimiento Islámico es “más peligroso” que Irán porque se trata de una “quintacolumna” y un “caballo de troya que quiere destruirlo todo”.
La Policía confiscó una pancarta con el eslogan “Muerte a los terroristas” y otra con la frase “Echad a Raed Salah”, el líder de la facción norte del Movimiento Islámico, condenado el pasado julio por escupir a un agente, cargo que él niega y que atribuye a una decisión política.
Varios diputados árabes en el Parlamento israelí acudieron a la ciudad, como Afu Agbaria, que tildó la marcha de “provocación fascista”.
Un pequeño número de miembros de Neturei Karta, un grupo de judíos ultra-ortodoxos radicalmente antisionistas, se unió a los árabes locales en la protesta con pancartas como “Sionistas asesinos” o “Árabes sí, sionistas no”.
En esta ocasión, los líderes árabes no han convocado una huelga general en protesta por el evento, como hizo el año pasado cuando una marcha similar acabó con más de veinte heridos entre manifestantes y policías.
La marcha coincide con la participación anoche de medio millar de personas en una ceremonia con motivo del veinte aniversario del asesinato de Meir Kahane, un rabino nazi-sionista a cuyo partido, Kaj, se le impidió presentarse a las elecciones en la década de los años 80 por el contenido racista y xenofobo de su programa.